Voy al encuentro de mis amigas de la infancia, las primeras
amigas que tuve en esta ciudad, todav�a recuerdo la primera reuni�n a la que me
invitaron, yo hab�a llegado del interior del pa�s apenas un mes antes, por
motivos del trabajo de mi padre tuvimos que mudarnos a la capital r�pidamente,
al entrar al liceo ellas fueron las primeras chicas que conoc�, �ramos un grupo
de cuatro, desordenadas y alegres, como todas las muchachas, de la zona.

Un d�a me invitaron a una reuni�n de pijamas, yo no sabia que
era eso y me explicaron que simplemente se reun�an para hablar y contarse cosas,
todas viv�amos muy cerca, y la reuni�n s� aria en el mismo edificio, en la casa
de Caren, para ese d�a mi mam� me compro una pijama de los 101 d�lmatas una
franela que me llegaba hasta los tobillos.

Con mi pijama nueva y un mundo de curiosidad me fui a casa de
Caren. Llegue de primera, Caren estaba con un pantal�n muy corto de color azul y
un top amarillo, se pod�a apreciar todo su cuerpo, tenia una piel muy blanca y
cabello amarillo, ojos azules claros. Era una de las chicas mas bonitas del
liceo, al entrar me dijo que pusiera las cosas en su cuarto y esper�ramos en la
sala a las dem�s chicas, yo segu�a con la curiosidad de saber que �bamos a
hacer.

Caren me explico que simplemente aprovechar�amos que su mam�
estaba de viaje para hablar de sus secretos mas �ntimos, las relaciones con los
chicos y esas cosas. Me dijo que estaba ansiosa por o�r a Laura que se hab�a
acostado con un chico de otro sal�n, y quer�a todos los detalles, yo me quede
impresionada y le pregunte como era eso que se hab�an acostado, ella me miro
fijamente, recuerdo que su mirada reflejaba mas que asombro curiosidad, de
inmediato me pregunto si yo era virgen, en ese momento sent� como si todo el
mundo esperara mi respuesta, le dije que si.

Que siempre mi madre me hab�a dicho que deber�a mantenerme
virgen para el matrimonio. Sus ojos se abrieron enormes, como no dando cr�dito a
lo que o�a y su risa inundo todo el sal�n, me pregunto si no me hab�a besado o
algo mas con alg�n muchacho de mi pueblo, yo le dije que si que claro que me
hab�a besado pero que nada mas.

Le cont� que desde peque�os, cuando regres�bamos del colegio
a la casa pas�bamos por un peque�o r�o, y que en verano cuando el calor era
mucho, nos ba��bamos desnudos en el r�o, �ramos un grupo de unos siete u ocho
ni�os entre barones y hembras, hasta que un d�a, al regresar �ramos solo tres de
los chicos y yo, decidimos ba�arnos para pasar el calor, nos quitamos toda la
ropa, uno de los chicos era mi novio, y mientras nos ba��bamos, el empez� a
acariciar mis senos, yo siempre lo dejaba tocar mi cuerpo como yo tocaba tambi�n
todo su cuerpo y partes intimas.

Uno de los chicos dijo que hab�a escuchado decir que por
entre las piernas de las mujeres se pod�a ver todo lo que hab�a adentro de uno,
los dem�s nos re�mos, yo le dije que eso era falso y que se lo pod�a demostrar,
me sub� a una piedra enorme y separe mis piernas ellos se acercaron para mirar,
mi novio dijo que era muy peque�o el espacio como para ver algo, as� que me
hicieron acostar y subir tanto mis piernas que mis rodillas me llegaban al
pecho, con mis manos tenia agarrado mis pies para abrir todo lo que pod�a mis
piernas, al acercarse los chicos, pude ver que sus penen estaba parados nunca
los hab�a visto de esa forma, ellos miraron y con sus manos separaban mas los
labios externos de mi vagina, uno de los chicos dijo para meter su penen dentro
de mi y as� abrir mas el camino para ver mejor, pero yo no quise.

De repente empezaron a acariciarse el penen, eso me gustaba
verlos como lo hacia, yo los dejaba tocar y mirar mi vagina y mi trasero que
estaban bien expuestos a sus miradas y manos, uno de los chicos insisti� en
meter su pene dentro de m�, yo me negu� nuevamente y le dije que no porque eso
dol�a mucho, que a mi hermana se lo hab�an metido y ella me dijo que le doli�
mucho, si quer�a meterlo que se lo metiera a otro de los chicos.

�l dijo que eso era mentira que no dol�a, para ese momento ya
me hab�a sentado al tiempo que respond�a dici�ndole que si el dejaba que mi
novio se lo metiera yo dejar�a que el me lo metiera a mi, los chicos se
callaron, se reunieron a hablar y me dijeron que si pero que tenia que dejar que
todos me lo metieran, yo acepte, el chico se puso de espalda y mi novio se lo
meti� en el trasero, pero cuando llevaba la mita adentro el chico se quejo y no
quiso que se lo metiera mas, como yo gane no deje que me lo metiera ninguno, nos
vestimos y nos fuimos, como a la semana nos mudamos para la capital y no e visto
mas a los chicos desde entonces.

Caren escucho mi historia atentamente, sus ojos ten�an un
brillo intenso y sus labios rojos como el coral estaban m�s rojos de los
mordiscos que se hab�a dado mientras yo hablaba. Caren me pregunto como pod�a yo
haber hecho eso y seguir virgen, si no me daba pena que los chicos me vieran
desnuda, yo dije que no ya que todos est�bamos desnudos y siempre lo as�amos
desde muy peque�os ya que todos �bamos al �nico colegio de la zona. De repente
me miro y me dijo, te voy a contar como perd� yo mi virginidad que fue la
primera ves que vi un chico desnudo.

Tenia yo unos doce a�os ya mi cuerpo se estaba formando, mis
senos hab�an crecido y mi pubis ya mostraba bellos rubios, fuimos a casa de un
t�o a pasar las vacaciones, ah� me reun� con mi primo Manuel, un d�a mientras
pase�bamos en bicicleta, sent� un escozor entre mis piernas, me di cuenta que
mientras avanzaba mi sexo rozaba con el asiento y esto causaba una cosquillea
que me gustaba mucho, llegamos a casa de un amigo de mi primo, y le cont� lo que
me hab�a ocurrido mientras ven�amos, �l se r�o y me pregunto si yo no lo hab�a
sentido antes, le dije que no que era la primera ves. Mi primo y su amigo ten�an
15 a�os, cuando su amigo oy� lo referido por m� a Manuel, me miro y me pregunto
si yo era virgen, yo ni siquiera sabia que era eso, los dos se miraron las
caras, luego me preguntaron si no me abr�a besado con alg�n chico antes, dije
que no, me dijeron para jugar la botella, que simplemente se as�a girar una
botella a as�a quien apuntara el pico se le pon�a una penitencia que tenia que
ser cumplida, yo acepte el juego.

La primera en perder fui yo, mi penitencia fue quitarme la
camisa y yo no quise, como castigo tenia que darle un beso a cada uno en la boca
y as� lo hice, sent� la suavidad de sus labios y como sus lenguas recorrieron
mis dientes y boca. Despu�s perdi� mi primo y le toco quitarse su camisa y lo
hizo, a su migo tambi�n, despu�s volvi� a perder y se quito el pantal�n, cuando
yo perd� me dijeron que escogiera o la camisa o el pantal�n, yo prefer� el
pantal�n.

Enseguida me toco la camisa, pero yo tenia mucha pena porque
no tenia sost�n puesto, ya que no usaba todav�a, los dos me miraron de arriba a
bajo detallando mi cuerpo que ahora solo lo cubr�a mi pantaletas, despu�s perdi�
mi primo dos veces seguidas y le toco quedarse sin nada de ropa encima, yo me
puse roja al ver su penen lo tenia duro y parado, en ese momento sent� otra ves,
el escozor que hab�a sentido en la bicicleta.

Despu�s perd� yo y no tuve m�s remedio que quitarme las
pantaletas, quedando totalmente desnuda, ya los tres est�bamos totalmente
desnudos, cuando volv� a perder, les dije que ya no pod�a quitarme nada, ellos
se miraron y me dijeron que entonces me tocaba darles un beso en el pene a cada
uno, despu�s de pensarlo un poco acepte, primero le toco a Manuel y cuando me
acerqu� a su penen el me dijo que abriera la boca porque as� tenia que ser.

Cuando lo hice el meti� su pene dentro de mi boca, me dijo
que lo chupara como si fuera un caramelo y lo hice, mientras lo hacia sent� que
su amigo tocaba mis nalgas, me saque el penen de Manuel de la boca y le dije que
le tocaba el turno a su amigo, mientras se lo as�a al otro chico. Note que el
escozor dentro de m� era m�s grande, Manuel se puso detr�s de m� y empez� a
tocar mi vagina con su penen eso me gusto y sent�a como se humedec�a mi vagina
de una forma que nunca hab�a sentido. De repente Manuel meti� su penen dentro de
mi vagina al principio me dol�a un poco, pero despu�s me empez� a gustar mucho,
sent�a como entraba y sal�a el penen duro de Manuel de mi vagina. De pronto el
amigo de Manuel boto un liquido blanco por su penen llen�ndome la cara y los
senos con el, al mismo tiempo Manuel saco su penen de mi vagina y solt� el mismo
liquido pero esta ves callo en mi espalda y nalgas.

Ellos me explicaron que ese liquido era el semen con que
sal�an las mujeres en estado, que por eso no pod�a dejar que nadie lo echa
dentro de mi, despu�s de eso regresamos a la casa, claro que antes me hicieron
prometer que no le dir�a a nadie lo que hab�a pasado entre nosotros tres.

As� perd� mi virginidad, entre mi primo y un amigo. Despu�s
de o�r ir atentamente a Caren le pregunte si no los hab�a visto otra vez, sus
ojos se entre cerraron con una mirada de picard�a, tomo mi mano y pude sentir un
calor que me invadi� desde la punta de mis dedos y subi� por mi brazo para bajar
luego por mi pecho hasta llegar a mi vagina, haci�ndome sentir la como nunca la
hab�a sentido, empez� a contarme la siguiente visita a la casa de su primo.

La semana siguiente mis padres ten�an una reuni�n y no pod�an
llevarme, llegamos a casa de Manuel de noche, desde la entrada fue una sola
carrera mis padres y mi t�o a cambiarse de ropa para ir a la reuni�n, y tal como
llegamos mis padres y mi t�o salieron, dejando me con mi t�a y mi primo, mi t�a
sirvi� la sena y una ves terminamos de comer, nos mando a cepillar los dientes y
a dormir.

En cuanto entre en el cuarto mi mente empez� a recordar los
hechos de la semana anterior y mi vagina se humedeci� r�pidamente, me puse una
franela larga y me deje solo las pantaletas, apague la luz y espere tenia la
esperanza de que mi primo viniera a mi cuarto, como pasaba el tiempo y no venia
decid� ir yo al suyo, me asome al cuarto de mi t�a y ella dorm�a profundamente,
llegue al cuarto de Manuel y el estaba dormido, en cuanto me vio una sonrisa
ilumino su rostro, yo me acost� a su lado, empezamos a besarnos y sent� como su
mano bajaba por mi costado hasta mi pierna, la meti� bajo mi franela y la subi�
hasta llegar a mis senos, yo me incorpore y me quite la franela, para que
pudiera tocarme bien, �l empez� a besarme y a tocar mis senos y bajo una mano
hasta mi vagina que todav�a estaba cubierta por mis pantaletas, �l se incorporo
y me quito las pantaletas dej�ndome desnuda totalmente y se quito su franela y
pantal�n corto que llevaba puestos.

Al acostarse a mi lado pude sentir su penen duro y caliente
contra mi vientre, sus manos segu�an tocando mis senos y mi vagina, yo separe
mis piernas todo lo que pude para el me tocara mejor, pero Manuel se paro y
empez� a besarme los senos y bajar lentamente hasta meter su rostro entre mis
piernas y pude sentir como su lengua recorr�a mi sexo, al mismo tiempo que
mord�a y chupaba todo lo que hay se le ofrec�a, yo por no ser menos tome entre
mis manos su penen empec� a besarlo y chuparlo todo, lo met� en mi boca hasta
donde pude, as� estuvimos un rato hasta que sent� que algo bajaba desde mi
cabeza y recorr�a todo mi cuerpo para ir a desembocar por mi vagina asi�ndome
temblar como nunca lo hab�a echo antes, el separo y me hizo poner en cuatro
patas, yo sabia que hab�a llegado el momento que yo esperaba desde que me entere
que regresar�amos a su casa.

Con sus manos separo mis piernas, pude sentir su penen
golpear contra mis nalgas, sus manos separaron los labios de mi vagina y
entonces sent� como entraba su pene suavemente hasta el final esto hizo que mi
cuerpo se estremeciera nuevamente, sent� la necesidad de mover mis caderas,
mientras que el entraba y sal�a de mi cuerpo, yo le dije que lo sacara antes de
acabar, de repente sent� como se erizaba su piel, el saco su penen de mi vagina
y lo puso en el agujero de mi trasero, sent� un dolor profundo al mismo tiempo
que sent�a como entraba su liquido a mi cuerpo por mi trasero, esto ocasiono un
placer inesperado, cuando yo le recrimine lo que hab�a hecho �l me explic�, que
si lo hacia por mi trasero no sal�a en estado, yo me quede mas tranquila, nos
besamos un rato m�s y me fui a mi cama.

Esa noche dorm� como un lir�n, descans� como nunca antes. Te
aseguro que hacer el amor es lo m�s relajante que hay.

Para este momento las manos de Caren hab�an recorrido desde
mi brazo hasta mis senos y bajado por mi cuerpo hasta mis piernas, todo esto
mientras me contaba la historia, esto me turbo un poco pero al mismo tiempo me
gustaba de tal forma que no pod�a pararla.

En ese momento llegaron Laura y Susana, entraron en medio de
sonrisas y abrazos, Caren no perdi� tiempo e invito a Laura a contarnos sobre su
aventura con el chico del liceo.

Pero eso sera en la siguiente parte.

Besos chao